sábado, marzo 19, 2005

Blogs recomendados

Se acerca una larga semana de vacaciones y El gato que pesca va a parar actividades por unos días.Hoy 19 de marzo aún debo el comentario sobre Donnie Darko y explicar por qué es el DVD recomendado de la semana. Por lo pronto adelanto que es dificil quedarse imperturbable frente a ella, la película llama al espectador a tomar partido, como lo señaló una alumna de la clase, o la amas o la odias. En fin pronto llegará el comentario...
Por lo pronto quiero dejar una serie de blogs y páginas recomendadas:
Empiezo con Puntadas de Penélope, blog de Carolina Alonso, que además de ser una gran amiga mía es una escritora talentosa e inteligente, como puede apreciarse en sus escritos. A aquellos amantes de la filosofía les recomiendo un paseo largo por Monadas de Alejandro Martín que con su infinita paciencia me dió acceso a este mundo de los blogs. Él, navegante más aavezado del ciberespacio, me hizo las siguientes recomendaciones que ahora transmito:imomus un blog muy interesante y en permanente actualización(en inglés) y, por último, de caracteristicas similares pero en español, Blue elephant.
Felices vacaciones...

miércoles, marzo 16, 2005

DVD RECOMENDADO DE LA SEMANA

DONNIE DARKO




Dirección y guión: Richard Kelly.País: USA.Año: 2001.Duración: 122 min.Interpretación: Jake Gyllenhaal (Donald 'Donnie' Darko), Jena Malone (Gretchen Ross), Mary McDonnell (Sra. Rose Darko), Drew Barrymore (Srta. Karyn Pomeroy), Patrick Swayze (Jim Cunningham), Holmes Osborne (Sr. Edward Darko), Katharine Ross (Dra. Lillian Thurman), Noah Wyle (Profesor Kenneth Monnitoff), Beth Grant (Srta. Kitty Farmer), Maggie Gyllenhaal (Elizabeth Darko), Daveigh Chase (Samantha Darko), James Duval (Jack).Producción: Sean Mc Kittrick, Nancy Juvonen y Adam Fields.Música: Michael Andrews.Fotografía: Steven Poster.Montaje: Sam Bauer y Eric Strand.Diseño de producción: Alexander Hammond.Vestuario: April Ferry.

Tema de la banda sonora de la película.

Mad World (Tears for fear)
All around me are familiar faces
Worn out places, worn out faces
Bright and early for their daily races
Going nowhere, going nowhere
And their tears are filling up their glasses
No expression, no expression
Hide my head I want to drown my sorrow
No tommorow, no tommorow
And I find it kind of funnyI find it kind of sad
The dreams in which I'm dying
Are the best I've ever had
I find it hard to tell you'Cos I find it hard to take
When people run in circles
It's a very, veryMad World
Children waiting for the day they feel good
Happy Birthday, Happy Birthday
Made to feel the way that every child should
Sit and listen, sit and listen
Went to school and I was very nervous
No one knew me, no one knew me
Hello teacher tell me what's my lesson
Look right through me, look right through me

domingo, marzo 13, 2005

Comentario primer capítulo de Lost

Lost


El día que se estrenó el primer capítulo de la serie Lost en Estados Unidos alcanzó a tener una audiencia de 20 millones de personas. La cifra es impactante a pesar de que los gringos ya nos tienen acostumbrados a su exageración (¿dónde está la piscina termal más grande? ¿El ovillo de lana más grande? ¿La coca-cola más grande? Etc.) Esta serie ha conseguido posicionarse junto a Desperate Housewife (de la que hablaremos en su momento) como uno de los programas más vistos en ese país. En días pasados se realizó su lanzamiento simultáneo por la televisión por cable en los canales Sony y AXN. Al ver ese primer capítulo es fácil entender el por qué de ese rápido éxito. La historia se inicia en plena acción y con una imagen fuerte y contundente, un avión ha caído en una playa. Los pocos sobrevivientes (unos 48) salen de entre los escombros, aún colapsados por el golpe. Llama la atención que casi todos están en perfectas condiciones, pero bueno, la escena es creíble. Rápidamente conocemos a Jack (Matthew Fox) el apuesto e intrépido doctor, una suerte de cruce entre E.R y Mac Gyver y que sabe de medicina, puede sanar, pero también posee toda clase de conocimientos prácticos: es el primero en realizar una expedición jungla adentro en busca de la cabina del avión, tiene nociones básicas de pilotaje, de montañismo y de supervivencia. Es ágil, rápido y mantiene la calma en situaciones extremas gracias a un método propio: si siente temor cuenta hasta cinco, tiempo en el cual permite que el miedo se apodere de él, pero solo por cinco minutos, terminado el conteo es tiempo de retomar el control de la situación (¡Uau!), si ese no es el hombre que todas quieren no sé qué decir. El personaje de Kate (Evangeline Lilly) no tarda en ver todas estas cualidades en su compañero de accidente y es fácil suponer que allí existirá una cierta tensión sexual amorosa que ya fue esbozada. Ella, cómo no, es supremamente guapa y sexy y ya nos regalaron una toma de su curvilíneo y trabajado cuerpo en ropa interior, o tal vez era un bikini satinado. La chica es una heroína tipo Lara Croft, aguerrida y fuerte, a esto se le suma que esconde un oscuro pasado. Alrededor de ellos se mueven toda suerte de personajes: el japonés machista que tiene oprimida a su mujer (una representación del choque entre culturas y de , por qué no, ese discurso que le encanta a los gringos de que en su país se respira mejor y se es más libre). La frágil japonesa, casi al final del capítulo, se desabotonó un botón tras ver la libertad de las otras mujeres y se esperan más actos de rebeldía y desacato a la autoridad masculina. A ellos se suma el rockero adicto (qué raro); la rubia tontarrona (inimaginable), que supondremos irá evolucionando y dejando de lado su gazmoñería y debilidad; el patán; el gordo rechazado; en fin, toda la fauna necesaria para una película que ocurriera en una preparatoria gringa. Aparece también el toque conciliador: el árabe que luchó por su país durante la guerra del golfo (prepárense republicanos). Como si recurrir a todas estas formulas conocidas y exitosas fuera poco los creadores de Lost dan un paso más al frente y ubican la acción en una isla perdida y misteriosa, en la que “algo” habita. Muchas tomas recuerdan de inmediato Jurassik Park (escena del capitán que es sacado violentamente de la cabina y mordisqueado por algo gigante que no se alcanza a definir). Cuando logran matar una de las amenazas que los acechan, los personaje descubren asombrados que se trata de un oso polar. ¿Evocaciones de La Isla del doctor Moreau? Puede ser, porque a ratos suena a experimento genético abandonado. El otro acierto es colgarse de la exitosa formula aplicada en el reality más visto en Estados Unidos: Survivor. Abandonados en la isla, como los concursantes del reality, los sobrevivientes del fatal accidente están condenados a convivir y trabajar en equipo para poder mantenerse con vida. Las personalidades extrañas o conflictivas aseguran historias para rato y el misterio de la isla genera suspenso y expectativa. Esperemos a ver qué nos depara el porvenir de esta serie y si podrán mantener vivo el interés del espectador.

Reseña corta sobre Hitch

Hitch, experto en seducción


Dirección: Andy Tennant.País: USA.Año: 2005.Duración: 122 min.Interprétes: Will Smith (Alex "Hitch" Hitchens), Eva Mendes (Sara Melas), Kevin James (Albert Brennaman), Amber Valletta (Allegra Cole), Michael Rapaport (Ben), Adam Arkin (Max Trundle), Julie Ann Emery (Casey), Kevin Sussman (Neil), Robinne Lee (Cressida), Nathan Lee Graham (Geoff), Jeffrey Donovan (Vance), Paula Patton (Mandy).Guión: Kevin Bisch.Producción: James Lassiter, Will Smith y Teddy Zee.Música: George Fenton.

Todo aquel que quiera ir un día a cine y divertirse un rato sin mayores complicaciones puede hacerlo sin problema pagando la boleta para Hitch, la última película con Will Smith que llega a nuestra cartelera. Sí, tiene los ingredientes de la comedia romántica que tanto gustan, sí, se complementan con los clásicos gags de la comedia gringa pero creo que el resultado de la mezcla sale bien librado. Señalaría que cada vez parece ser más dificil hacer una comedia o contar una historia de amor que contenga alguna novedad. En Hitch lo intentan, no se arriegan a perder la fórmula de oro (en ese aspecto es superior Bajo el sol de Toscana) pero se esfuerzan por contar algo de otra manera. La acción se centra en los protagonistas masculinos más que en los femeninos y hacen a un lado los chistes escatológicos y vulgares que ya nos tienen tan saturados. A ratos la película peca por ambiciosa (¿se puede ser ambicioso en este cine?) y deja algunos cabos sueltos, o los desarrolla de una manera no muy convincente pero ¿quién le está pidiendo tanta coherencia a una comedia ligera? Al final hay moraleja edificante y la tranquilidad (después de Closer) de creer que "el amor verdadero" si existe. Compren una palomitas, ríanse un rato con este seductor que se las sabe todas menos cómo abrir su corazón y quédense hasta el final porque los últimos cinco minutos son los más divertidos de toda la película.

martes, marzo 08, 2005

Reseñas Mar adentro, Golpes del destino, Closer

Mar adentro





Dirección: Alejandro Amenábar.País: España.Año: 2004.Duración: 110 min.Intérpretes: Javier Bardem (Ramón Sampedro), Belén Rueda (Julia), Lola Dueñas (Rosa), Mabel Rivera (Manuela), Celso Bugallo (José), Clara Segura (Gené), Joan Dalmau (Joaquín), Alberto Jiménez (Germán), Tamar Novas (Javi), Francesc Garrido (Marc).Guión: Alejandro Amenábar y Mateo Gil.Producción: Fernando Bovaira y Alejandro Amenábar.Música: Alejandro Amenábar.Fotografía: Javier Aguirresarobe.Montaje: Iván Aledo.Dirección artística: Benjamín Fernández.Vestuario: Sonia Grande.

Peor que se te muera un hijo es que se quiera morir

De la película de Alejandro Amenábar ya se ha dicho tal vez demasiado. Más allá de insistir en ciertos temas reiterativos hay algunas cosas que quisiera señalar. Lo primero es la capacidad que tiene este joven director para realizar inesperadas “vueltas de tuerca”. Qué más se puede decir del virtuosismo con el que maneja el suspenso en Tesis y en Los otros. (En esta última, es envidiable el despliegue de todo un imaginario gótico y fantástico, reutilizado de una manera original, en la que el terror es producido por algo que no vemos pero que creemos percibir). En el caso de Mar adentro la vuelta de tuerca está en la capacidad de tratar un tema tan difícil sin caer en la tentación del melodrama fácil, ni en la de haberse centrado en el proceso judicial que vivió Sampedro y realizar una suerte de Philadelphia ibérica en la que el tema ya no fuera el SIDA sino la eutanasia. Amenábar, a mi juicio, consigue mantenerse al margen de esas tentaciones y termina por poner el dedo en la llaga en otro tema.: ¿qué nos da razones para vivir? Ahí están, desnudas frente a nosotros, durante el tiempo que dura la película las preguntas que la humanidad ha intentado contestarse durante siglos, ¿para qué vivir?, ¿qué o quién justifica nuestra existencia? La familia, el amor, la poesía, el servicio a los otros, la compañía de los amigos, razones parece haber muchas pero lo cierto es que ninguna es suficientemente fuerte para hacer a Ramón Sampedro, ese hombre que llora riendo, cambiar de opinión, él no desea vivir más. Somos testigos de las emociones encontradas que su decisión produce a su alrededor porque aceptar sin titubeos que alguien desea morir es, en últimas, aceptar que quizás no hay razones suficientes para convencerlo de lo contrario. Para Ramón pasearse por ahí en una silla de ruedas le parecen simples migajas de lo que fuera una existencia libre y despreocupada en la que recorrió medio mundo antes de los veinte años, estar postrado en una cama, imposibilitado para realizar cualquier movimiento por mínimo que sea (tocar la mano de una mujer) no es vida para él. Nada de lo que haga lo va a devolver a ese instante en el que distraído se lanzó contra un banco de arena, uno de esos pequeños momentos, instantes aparentemente intrascendentes que pueden modificar toda una existencia. Lo otro es un lento transcurrir de amaneceres que sin embargo, lo han hecho más sabio, más dolorosamente humano y conciente de nuestras contradicciones y flaquezas, de nuestro deseo permanente por encontrar una respuesta, un camino un asidero que nos libre de la muerte o de nosotros mismos. Es por eso que el personaje de Sampedro consigue fascinarnos porque el ya tiene la respuesta a las preguntas y aunque sea la muerte su única solución eso no deja de ser un canto a la vida, una aceptación trágica sí, pero aceptación al fin de cuentas del destino que le tocó en suerte. Mar adentro no quiere emitir juicios pero sí termina por demostrar que una historia no es una sola sino que tiene muchos matices, muchos ángulos y que lo que podemos interpretar sobre la vida de los otros no son sino vanos intentos en los que terminamos, teniendo como el cura de la película “una boca muy grande.”
Con la última escena, no contento con lo anterior, Amenábar decide hacernos una confrontación final, ¿qué requiere más valor o más cobardía, morir dignamente, o aferrarse a la vida aunque en el esfuerzo terminemos desdibujándonos nosotros mismos?



Golpes del destino
Million Dollar Baby






Warner Bros., 2004, 137 minutos
Director:Clint Eastwood Guión: Paul Haggis, basado en las historias de F.X. Toole Edición: Joel Cox Intérpretes:Clint Eastwood (Frankie Dunn) Hilary Swank (Maggie Fitzgerald) Morgan Freeman (Eddie)

Hillary Swank es Maggie Ftizgerald, una mujer que a pesar de sus 31 años está decidida a convertirse en boxeadora profesional. Hillary, indiscutible ganadora del Oscar por este papel, ya nos había demostrado tras rescatar la saga de Karate Kid, que podía pelear de manera convincente, y aquí tras un exhaustivo entrenamiento y un gran trabajo de caracterización le creemos cada uno de sus puños y no podemos evitar unirnos a las exclamaciones de los demás espectadores durante las escenas de peleas. ¿Acaso hay algo que puede representar mejor la perseverancia y la pasión por cambiar un destino en el que se parece predestinado “a no ser nadie” que una mujer dándose, literalmente, golpes para hacerlo? Clint Eastwood, por su parte, además de componer la música y dirigir, es el encargado de dar vida a Frankie Dunn un entrenador atormentado y retraído, que parece ya haber sufrido demasiado y se encuentra entregado a sus remordimientos cuando decide aceptar un último reto, entrenar a Maggie y convertirla en campeona. Durante esos primeros minutos de película vemos la tenacidad y entereza que se deben tener para sobrepasar obstáculos e imponerse frente a rivales que, como lo dice Fankie, son mejores que nosotros, y cómo, la misma determinación y obstinación (condiciones básicas del boxeador), que llevan a Maggie a entrenar como autómata y soportarlo todo con estoicismo, hacen a Frankie regresar cada día, año tras año, a la iglesia a ver si termina por encontrar un poco de sosiego a pesar de su incredulidad.
Ahí estamos, inocentes, y durante varios minutos sentimos que se están emulando y superando los mejores momentos de Rocky y que el microcosmos que se recrea en el viejo gimnasio que dirige Frankie ya ha conseguido darnos suficientes cosas para pensar. No es así... lo que parecía ser una historia sobre el coraje y la autodeterminación termina por llevar de la mano al espectador a recorrer otros caminos, más difíciles y sinuosos. Tras esa experiencia emocional a la que terminamos abocados, solo nos queda por decir que no son únicamente las historias de los grandes vencedores las que merecen ser contadas, que la noción de derrota o de pérdida es francamente relativa y que mientras enfrentamos nuestras batallas solitarias es posible encontrar compañeros de viaje, esos amigos que se transforman para nosotros en una nueva familia, quizás la única verdadera, que nos da fuerzas para cumplir nuestro destino y encontrar el camino de la redención. Finalmente, todo es más sencillo, más allá de las victorias y las derrotas, los golpes inesperados y los nocaut decisivos Golpes del destino es la hermosa y sentida narración de un anciano que intenta describir de qué está hecho el corazón de un amigo.


Llevados por el deseo
Closer




Dirección
: Mike Nichols.Año: 2004. Duración: 98 min. Intérpretes: Julia Roberts (Anna), Jude Law (Dan), Natalie Portman (Alice), Clive Owen (Larry).Guión: Patrick Marber; basado en su obra teatral "Closer".Producción: Mike Nichols, John Calley y Cary Brokaw.Fotografía: Stephen Goldblatt.Montaje: John Bloom y Antonia Van Drimmelen.Diseño de producción: Tim Hatley.Dirección artística: Hannah Moseley.Vestuario: Ann Roth

El que vaya a Closer esperando, como de pronto lo pueden sugerir ciertos cortos, ver una historia de amor, sí, con traiciones y desplantes, pero finalmente de amor puede quedar un tanto sorprendido. ¿Creíamos que íbamos a ver cómo se gesta el amor?, ¿los pequeños gestos, los coqueteos que son la delicia de todos aquellos que gustan del género romántico? Para nada. La película se inicia sin miramientos, va rápido y se detiene solo para hacernos participes de ciertos momentos claves y de los crudos diálogos entre los protagonistas. Los saltos temporales se suceden sin preaviso, no esperen un condescendiente seis meses o un año después. Lo que vemos es la evolución o involución (auque el término suene extraño) de dos relaciones que corren paralelas y se cruzan de maneras inesperadas y peligrosas. La película es una adaptación hecha por Patrick Marber de su exitosa obra teatral del mismo título, presentada en Inglaterra. El director, Mike Nichols (¿Quién le teme a Virginia Wolf?, El graduado) se decidió a mantener el tono teatral y esa es otra de las razones por la cual la película se aleja aún más de las grandes producciones hollywoodenses y toma un tono más propio del cine independiente. Es refrescante, y eso es necesario decirlo, ver a ese elenco de “luminarias”, como lo son Julia Roberts, Clive Owen, Jude Law y Natalie Portman, asumir el reto que propone este tipo de películas. Los cuatro actores consiguen dar vida a personajes complejos y convincentes acompañados por una banda sonora muy bien escogida que aparece solo en los momentos indicados. La fuerza de Closer se centra en los diálogos y en lo que allí se plantea. ¿Qué es el amor? ¿Cómo definirlo en una sociedad cada vez más individualista en la que las relaciones personales se han convertido, muchas veces, en oscuras transacciones de bajos deseos y represiones? Para la muestra baste recordar la escena de encuentro entre los personajes interpretados por Clive Owen y Jude Law en una página de sexo virtual. ¿Cómo definir el amor entre personas que se debaten de manera permanente entre la culpa, el fracaso el descontento y en el que ser otro, o pretender serlo se convierte en una estrategia necesaria para sobrevivir y no ver la sordidez que los rodea? Por eso es difícil ver esta película y sentir empatía por las historias de amor que allí se desarrollan, o, mejor dicho, por eso quisiéramos sentir que no nos parecemos en algo a esos seres desolados que están allí, recordándonos que la consecución del amor termina siendo la confirmación de la más profunda soledad y del desconocimiento absoluto de ese "extraño" que duerme a nuestro lado.