miércoles, agosto 01, 2007

El regreso

No debería empezar hablando del silencio y como no debería lo hago... En fin, de nuevo tuve días de no escribir. Escribí en mi cabeza, en mi cuaderno pero no fijé nada aquí.. ya pasó el tiempo de escribir sobre muchas cosas: las velitas colocadas en la plaza de bolívar y cómo vi a tantas y variadas personas encendiendo su vela mientras charlaba, mientras se reía, mientras hacia un silencio doloroso, o mientras recordaba a un familiar muerto. Un reciclador que pasaba por ahí solo atinó a decir "pero si es una vela por muerto esto no alcanza a nada".
No escribí tampoco sobre la marcha que se hizo pocos días después y sobre la sensación inmensamente sobrecogedora que se experimenta al ver la gente unida por una causa común, basta asistir a un partido de lo que sea y compartir con una hinchada poderosa para conocer esa fuerza que se incrementa si el fin es más noble (no que hacerle barra al equipo favorito no lo sea). No escribí tampoco sobre las nuevas eliminatorias de Latin american idol que me dejaron otra vez consternada aunque finalmente termino viendolas (atracción morbosa), ni he escrito sobre otras cosas.
He estado leyendo, leí los hombres invisibles de Mario Mendoza, releí Cien años de soledad con calma y lentamente y después me costó trabajo salirme de ese universo tan bien construído y de la narración tan particular que consigue García Márquez. Leí El corazón helado de Almudena Grandes, medio destripandolo con tristeza porque ya no disfruto su escritura y porque sus últimos libros han sido una lenta decepción (lo de lenta es sobre todo porque tienen 900 páginas). No sé bien qué pasa pero me canso de que repita una y mil veces ciertos pasajes, de sus descripciones donde mastica todo y de sus historias de amor que se han vuelto forzadas y repletas de clichés. ¿Dónde quedó el aliento de sus otras novelas o de sus cuentos?
Ahora me pregunto si cuando me devoré Malena es un nombre de tango o Atlas de geografía humana mis gustos eran otros y su escritura era igual pero me parece dificil de creer.
Tras ver la última película de Harry Potter decidí no esperar un año para conocer lo que seguía, me leí de un tirón Potter y el príncipe misterioso y como puedo ser bien obsesiva supongo que me tocará seguir con el otro porque el 2010 está lejano.
En www.ochoymedio.com ya subí reseñas de Ratatouille, Transformers y Harry Potter.
Estuve también de paseo... saliendo de Bogotá, pensando otras cosas, y en medio de los vapores de la lacada de mi piso de madera, el desorden de los muebles y la fiebre de mi hija retomo el rumbo de mis pensamientos y regreso a la escritura.
Supongo que así son las vacaciones.

1 comentario:

CamiloT dijo...

Bienvenidas tus letras Diana